Como todos los años, celebramos el emprendimiento, pero un día tan especial como el del sábado, celebramos, damos visibilidad y apoyamos el emprendimiento femenino.
El 19 de noviembre es un día especial para toda nuestra red de emprendedoras y promotoras, mujeres valientes que luchan por seguir construyendo sus proyectos día a día. Esta semana nos hemos acercado a ellas, haciéndoles partícipes en este nuevo post, para que den respuesta a cuatro retos que les hemos planteado. en este caso, Haize de Kuvu nos responde.
Lee el post completo aquí.
Haize Trueba, emprendedora social Acumen Fellow de la Cohorte 2021 y co-fundadora de la empresa social Kuvu.
Desde Kuvu tenemos la misión de mejorar la calidad de vida de las personas previniendo y reduciendo la soledad no deseada. A raíz de esta misión y como primera acción, hemos generado una plataforma online donde personas mayores que viven solas pueden alquilar las habitaciones disponibles que tengan a jóvenes estudiantes y/o trabajadores. Este marketplace genera convivencias entre diferentes generaciones para potenciar las conexiones, la compañía y fomentar la emancipación.
Reto 1: ¿Cuáles han sido las principales barreras que te has encontrado a la hora de poner en marcha tu proyecto?
Emprender siempre es duro por la conexión que generas con tu proyecto y el esfuerzo que supone. En nuestro caso, se le suma el hecho de ser una empresa social y trabajar en un sector en el que todavía existen muchas barreras a nivel cultural y el miedo que supone proponer algo que salga de lo más puramente tradicional.
Esto ha hecho que hayamos tenido que adaptarnos constantemente y que sigamos aprendiendo de nuestro entorno para diseñar aquello que dé verdadera respuesta a la necesidad que hemos detectado.
Reto 2: ¿Cómo te ha afectado a nivel laboral y social ser una mujer emprendedora? ¿Qué te ha motivado a seguir adelante?
He de decir que estoy emprendiendo en un entorno muy abierto y he tenido la suerte de no tener que aguantar muchas cosas o encontrar tantas barreras como estoy segura han encontrado otras mujeres.
Lo que si me estoy encontrando es que aquellas entidades con las que trabajamos o en muchos de los entornos en los que estamos sigue viéndose que los altos cargos, y por lo tanto los más visibilizados, están dominados por hombres, mientas que las partes administrativas, recursos humas, de cuidado, etc. están sobre todo liderados por mujeres. Y todo esto centrándonos únicamente en estos dos géneros, claro.
Sigo adelante porque creo en la necesidad de cambiar estas cosas de las bases sociales que nos hemos autoimpuesto tanto mujeres como hombres. Tenemos la oportunidad de que poco a poco independientemente de tu género, tu orientación sexual, tu procedencia, etc. podamos acceder a los puestos que queramos.
Reto 3: ¿Has contado con referentes o una persona aspiracional que te haya empujado a este camino? ¿Crees que en el mundo de los negocios actual hay suficientes referentes femeninos?
No creo que haya contado con tantas referentes como me hubiera gustado al principio. Si he de decir que cada vez conozco más y tengo más personas que me inspiran aunque a veces no sean tan conocidas como a mi me gustaría.
Y, por supuesto que creo que nos falta mucha visibilización y, a veces, incluso algo de discriminación positiva que permita a las generaciones del presente y del futuro ver de lo que pueden ser capaces y más. Hace poco leíamos sobre la meritocracia vs discriminación positiva y no creo que podamos polarizar esas dos posiciones si queremos una sociedad que cada vez sea más equitativa, justa y andrógina.
Reto 4: ¿Cómo motivarías a las futuras generaciones a emprender? ¿Qué propones o qué echas de menos por parte del modelo de educación y emprendimiento para fomentar el ecosistema de startups de Bizkaia?
Podríamos pasarnos horas respondiendo a estas preguntas. Veo en el emprendimiento una de las oportunidades a presente y futuro ya que tenemos mucha incertidumbre de cuáles van a ser los trabajos del futuro, por lo que nos tocará ir inventándolos, adaptar la educación e innovar.
Estas son algunas de las cosas que echo de menos en el modelo educativo, y el fomentar la prueba y error a la hora de probar cosas, tomar decisiones, etc. Que se permita “fracasar” desde el entendimiento del aprendizaje adquirido y la formación en herramientas para salir adelante intentando nuevas iniciativas.